Estimado Rubén: ¡Tremendo, su libro! Muy
fuerte, muy convincente, muy a ras de tierra. Estoy gratamente sorprendido. Ha
encontrado usted un tono, una libertad para contar de qué nos va la vida en
este país de tumbas y muertes y desaparecidos. Literatura de la frontera.
Las menciones a Revueltas, a Anaya, a Bolaño
(y a Willivaldo Delgadillo, supongo) e incluso a Rimbaud me parecen más
apropiadas que nunca. Me recordó que mi primo Jorge Vargas y su teatro "La
línea amarilla" montaron en ciudad Juárez una obra llamada "Baños
Roma", acerca de Mantequilla Nápoles. Felicidades mil. Hace falta esta
poesía
Un abrazo
Evodio