Cumplir un sueño se dice fácil porque es lo más cercano a las utopías y más un sueño de niños que se va haciendo cada vez más cercano, recuerdo de aquella tarde donde aquel ser pequeño dentro de un televisor cumplió el sueño de todos quitándose a todos y metiendo uno de los goles más importantes de nuestro tiempo, lo vi con mis ojos junto a mi padre, desde ese día decidí acompañarlo a todos lados fue y es lo más cercano que tengo a una admiración profunda por alguien que vino desde lo más bajo para decirnos a los pobres del mundo se puede luchar contra los poderosos.
Llegó a México el mejor de la historia a dejarnos otra vez un pedacito de ella, porque México no sería sin él y el sin México tampoco y Diego lo sabe, lo tuvimos tan cerca de nosotros para quienes lo queremos y amamos con todas sus contradicciones y aciertos lo disfrute cada fin de semana me dolía cada estúpido que se creía capaz de hablar de él junto a un micrófono frío y calculador sabían que les daría la nota ahí radica su carácter inapropiado el cederle espacio a los estúpidos.
Gracias diego por esos días en México que siempre voy a recordar por tu arrogancia única y ese amor al fútbol y a la pelota que nunca se acabe